¿Qué es la terapia cognitivo-conductual?
La terapia cognitivo-conductual (TCC) es un enfoque terapéutico basado en la premisa de que nuestros pensamientos, emociones y comportamientos están interconectados. La TCC se centra en identificar y cambiar patrones de pensamiento negativos o disfuncionales que pueden contribuir a problemas emocionales y comportamentales. Al cambiar estos patrones cognitivos, se busca modificar conductas y emociones problemáticas.
Al tratarse de una recombinación de técnicas cognitivas (centradas en los procesos de pensamiento) con técnicas conductuales (orientadas hacia la conducta) es una terapia enfocada a la acción, y los primeros resultados de la misma pueden ser pronto apreciados, lo que a su vez sirve como factor motivador y de adherencia al tratamiento. Además, la terapia cognitivo-conductual es una terapia a corto plazo y aunque su duración variará según la gravedad de los problemas y las metas terapéuticas, en general, las TCC suelen ser más breves en comparación con otros enfoques terapéuticos y el número total de sesiones puede oscilar entre unas pocas semanas y varios meses.
Existe evidencia empírica de la eficacia de la terapia-cognitivo conductual en determinados tipos de problema, y en concreto en padecimientos como la ansiedad, la depresión, los ataques de pánico, las fobias o la bulimia; las tasas de éxito varían según la afección y la adherencia del paciente, pero en muchos casos, se han reportado tasas de recuperación significativas. Por esta razón, la TCC es una opción terapéutica utilizada en la mayoría de consultas de Psicología Clínica.
¿Cómo funciona la terapia cognitivo-conductual?
Primero realizaremos una evaluación inicial para comprender tus preocupaciones y objetivos y estableceremos una relación terapéutica de confianza.
A continuación, a través de la conversación y la observación, identificaremos patrones de pensamiento negativos, distorsionados o irracionales que pueden contribuir a problemas emocionales.
Posteriormente, trabajaremos para desarrollar estrategias cognitivas, como la reestructuración cognitiva, que te ayudarán a cuestionar y cambiar los pensamientos disfuncionales.
La TCC también se enfoca en modificar comportamientos problemáticos. A través de la exposición gradual y la práctica de nuevas respuestas, promovemos un cambio de comportamiento.
Puede que te asignemos tareas entre sesiones para practicar nuevas habilidades y aplicar lo visto en terapia en la vida cotidiana.
Por último, a medida que avanzas en la terapia, realizaremos un seguimiento de tu progreso y ajustaremos las estrategias según sea necesario.
Conviene enfatizar que al estar interrelacionados el comportamiento, la cognición y las emociones, si introducimos un cambio en cualquiera de ellos, influirá sobre los demás. En la terapia cognitivo-conductual se trabaja para modificar determinados patrones de pensamientos, en aras de lograr un cambio en el comportamiento y en el estado emocional de la persona. A lo largo de la terapia se suelen usar técnicas de reestructuración cognitiva (que incluyen cuestionar las creencias negativas y reemplazarlas con alternativas, resolver problemas o desarrollar capacidades para sobrellevar las situaciones difíciles), entrenamiento en relajación y técnicas de afrontamiento del estrés o de exposición.
Ventajas de la terapia cognitivo-conductual
La primera ventaja es que se trata de un enfoque basado en la evidencia, y por tanto cuenta con investigaciones sólidas y ha sido ampliamente respaldado por estudios científicos.
Segundo, se focaliza en las soluciones, centrada en identificar y resolver problemas específicos, proporcionando así a los pacientes herramientas prácticas para el cambio.
En tercer lugar, es una terapia relativamente breve en comparación con otros tipos de terapia, lo que la hace accesible y efectiva para muchas personas.
Por último, la TCC brinda a los pacientes herramientas útiles para toda la vida, al adquirir habilidades que podrán aplicar en sus problemas futuros: es, por tanto, una herramienta poderosa para el cambio y la transformación personal.